Si estás en el proceso de mejorar tus finanzas sabes que manejar tus gastos personales es una parte clave de la fórmula, ¿cierto?
Si gastamos más de lo que generamos entonces nos alejamos de nuestras metas y sueños más grandes.
Por esa falta de control de gastos es que constantemente escuchamos a las personas decir “¡¿por qué no me alcanza el dinero?!” o “nunca logro apegarme a mi presupuesto”.
Escribimos este blog con la intención de evitar que pasés por estas situaciones y de guiarte en el camino hacia unas finanzas más saludables.
Así que si te estás preguntando ¿cómo manejar mis gastos personales con un presupuesto efectivo? Te invitamos a seguir leyendo y a tomar acción, para que cada vez estés más cerca de tus metas financieras 🙂
Empecemos por responder a las preguntas más comunes:
¿Por qué se me hace tan difícil manejar mis gastos personales? ¿Por qué nunca puedo seguir el presupuesto?
La principal razón por las que las personas no aciertan los presupuestos es porque nunca se han detenido a preguntarse:
¿Será que hay algo en este procedimiento que yo pueda mejorar, cambiar o eliminar?
Tener conciencia de lo que no está funcionando es el primer paso para hacer cambios importantes en cualquier área de nuestras vidas.
Entonces, si un presupuesto no funciona lo que deberíamos hacer es preguntarnos: ¿por qué no funciona? ¿Cómo podría yo manejar mis gastos personales de una forma más efectiva? Hay que tener la disciplina para hacerse preguntas incómodas hasta obtener respuestas liberadoras.
Ahora, con al finalidad de hacerte este proceso más sencillo, vamos a compartir con vos algunas razones comunes que alejan a las personas de seguir su presupuesto y las hacen gastar más:
1. Hacer el presupuesto en una hoja electrónica y no escribirlo a mano
La manera más eficiente para retener información es escribirla a mano y luego repetirla en voz alta. Retener es realmente importante cuando se trata de un presupuesto que hay que seguir al pie de la letra.
Al escribir a mano, sujetar el lápiz y pensar en los números que escribimos estamos estimulando una parte del cerebro denominada sistema de activación reticular. Este sistema actúa como un filtro de procesamiento para el cerebro y le da más importancia a las cosas en las que estamos concentrados activamente.
También, al repetir lo que escribimos en voz alta y escucharnos, estamos apoyando nuestra capacidad de aprender y memorizar.
Si retenemos la información, entonces se vuelve una regla en nuestro subconsciente y tomamos acción más fácilmente.
2. Creer que los gastos se pagan únicamente con dinero y no con horas vida
Es muy importante ser conscientes de que estamos pagando los gastos con el dinero que conseguimos a cambio de nuestras horas de vida.
Por lo tanto, mientras más cosas tengamos que pagar vamos a tener que dar más horas de vida a cambio. Horas que al final del día nadie nos va a devolver.
Si tenemos eso en mente es más sencillo hacer un presupuesto realista que nos permita reducir el número de gastos nuevos o innecesarios.
3. Tomar en cuenta sólo los gastos mensuales y omitir los anuales
Los gastos anuales (que no ocurren todos los meses) como los cumpleaños familiares, vacaciones, navidad, seguros médico y de vida, seguros e impuestos de bienes inmuebles y carros, derecho de circulación del automóvil, entre otros, ocurren todos los años y sin embargo rara vez se toman en cuenta cuando planificamos el año por lo que terminan dejando un hueco en el presupuesto y hasta deudas al final de cada año que se van acumulando por falta de planificación y por no tener un sistema de administración del dinero.
Estos gastos típicamente pueden ser equivalentes hasta a 2 meses adicionales de gasto y por lo tanto no tomarlos en cuenta es un error letal.
Nuestros alumnos de Masterkit tienen un sistema de manejo intencional de sus gastos por lo que le dicen al 100% de su dinero a donde ir antes de que ocurra el desembolso y conocen exactamente para donde dirigir cada centavo lo cual hace que puedan manejar el dinero sin siquiera tener que pensarlo.
El 93% de los millonarios hacen sus presupuestos con base en sus ingresos y egresos anuales con revisiones mensuales.
El fin de hacerlo de esta forma es identificar la cantidad de dinero que ingresa a tu cuenta anualmente y cuánto te queda al final del periodo.
También sirve para tener claro cuánto es el monto de ciertas categorías con el fin de mejorarlas y no dejar por fuera gastos que se hacen una o dos veces al año y que pueden convertirse en un faltante importante de los ingresos anuales.
4. Usar tarjetas y no efectivo para pagar
Estudios demuestran que una persona que utiliza tarjeta de crédito o tarjeta de débito en vez de efectivo tiende a gastar hasta un 83% de más, ¡¿podés creerlo?!
Es mucho más sencillo manejar tus gastos personales y evitar compras innecesarias al pagar con efectivo que con tarjeta.
Otra situación que se da con las tarjetas y con la que necesitamos ser cuidadosos es con los pagos automáticos.
Muchas veces acumulamos suscripciones que no aprovechamos y como no nos damos cuenta entonces las seguimos pagando. Si las sumamos todas puede terminar siendo un monto significativo.
5. No reconocer nuestra personalidad del dinero
Una herramienta como el presupuesto fácilmente se puede dejar de lado cuando no satisface nuestras necesidades.
Primero, debemos reconocer nuestra personalidad del dinero… ¿Somos gastadores, evasores, ahorradores o monjes del dinero? Esto es algo que aprenden nuestros estudiantes en el programa de Libertad Financiera, Masterkit.
Por estas razones es que es imperativo tener un sistema que trabaje, aplique, solucione, satisfaga y te genere seguridad tomando en cuenta esta personalidad de dinero.
¿Cómo logramos este sistema? Con nuestra metodología para distribuir de forma intencional los ingresos que te permite gastar en lo que más te haga feliz sin descuidar las áreas más difíciles de acuerdo a tu forma de administrar el dinero.
¿Qué más necesito saber para cumplir mi presupuesto y manejar mis gastos personales de forma efectiva?
Después de conocer estos errores y saber qué podés hacer para reemplazarlos necesitás mucha disciplina, acción y educación.
Hay muchas personas que nos preguntan… ¿Tener un presupuesto para manejar mis gastos personales significa que estoy limitado y no puedo darme gustos?
La realidad es que un presupuesto funcional da paz mental y elimina el sentimiento de culpabilidad que muchas personas tienen después de hacer compras compulsivas.
Para las parejas elimina muchas peleas por dinero ya que los pone en la misma página y realidad. Les ayuda a trabajar en equipo para alcanzar metas, objetivos y sueños financieros.
Muchos de nuestros alumnos después de unos meses de aplicar su presupuesto comienzan a gastar menos en algunas categorías que consideran innecesarias y empiezan a tener dinero extra para pagar deudas o para invertir en el largo plazo.
Probablemente los 3 primeros meses de implementar el nuevo hábito de hacer un presupuesto los números sean un poco o muy diferentes a los que se escribió pero no hay de qué preocuparse.
Típicamente entre el mes 4 y 6 empiezan a verse más uniformes y se pueden afinar más 🙂
Lo importante es que se está creando el hábito y el dinero cuando sabe para dónde ir, se vuelve en el mejor esclavo en lugar de nuestro amo.
¿Te sentís listo para empezar a crear tu presupuesto y tomar el control de tus finanzas?
Si la respuesta es SÍ entonces queremos invitarte a agendar una llamada gratuita con nuestro equipo.
El objetivo de la llamada es que apliqués a nuestro programa de Libertad Financiera, Masterkit de Financultura y que juntos analicemos de qué forma podemos guiarte para que alcancés tus sueños.
Podés hacer click en el botón de abajo y elegir la fecha y hora que más te convenga para que hablemos, es una reunión informal y amistosa 🙂
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Esperamos verte pronto 🙂
Por tu libertad,
– Mari, Gus, Inti y el equipo de Liber.
